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Fuente: elEconomista
Los Juegos Olímpicos de París 2024 ya han llegado a su fin después de más de dos semanas repletas de competiciones deportivas del más alto nivel que, sin embargo, no han estado exentas de polémicas. Durante este tiempo más de 10.500 atletas de 206 delegaciones diferentes han 'peleado' para lograr uno de los galardones más ansiados en el mundo del deporte: una medalla de oro olímpica. Pero, dejando de lado el valor sentimental,
¿Cuánto cuesta realmente una medalla de oro de los JJOO de este verano? Según cálculos de Bloomberg, el precio ha marcado récord.
La capital francesa se despidió ayer del espectáculo deportivo con una ceremonia de clausura en la que, con la actuación sorpresa del actor Tom Cruise (protagonista de la saga de películas de Misión Imposible, entre otras), pasó el testigo a la ciudad estadounidense de Los Ángeles. Será allí donde se celebrarán los próximos Juegos Olímpicos de Verano dentro de cuatro años, en 2028.
¿Cuánto cuesta una medalla de oro olímpica?
Basándose en el precio de las materias primas que se usan para fabricar las medallas más deseadas, pueden alcanzar un precio de unos 200 a 500 dólares cada una, de acuerdo a la agencia de noticias norteamericana.
En concreto, las medallas contienen seis gramos de oro, cuyo precio se disparó en julio gracias a las compras de los bancos centrales, el interés de los minoristas chinos y las expectativas de relajación de la política monetaria estadounidense. El mes pasado el metal precioso marcó máximos históricos por encima de los 2.480 dólares por onza, marca que este lunes vuelve a alcanzar.
Este año también la plata se ha revalorizado de forma notable, aunque en las últimas semanas su precio haya perdido brillo. En mayo llegó a superar los 34,40 dólares por onza. La plata representa al menos el 92,5% del peso de las medallas de oro.
Incluso ajustado a la inflación, el valor de las medallas sigue siendo el más alto de la historia, y los deportistas olímpicos que las han logrado se benefician tanto de la fuerte subida de los precios de los lingotes como de unas medallas cada vez más abultadas.
En la práctica, quienes las consiguen no suelen fundir ni vender sus medallas, en gran parte debido a su elevado valor (que no precio) sentimental. Además, las medallas ganadas en París también contienen algo especial: un pequeño trozo de la emblemática Torre Eiffel.
Más allá de los metales preciosos
Las medallas olímpicas que se venden pueden costar mucho más que su valor metálico. Una de las medallas de oro de Jesse Owens de Berlín 1936 alcanzó casi 1,5 millones de dólares en una subasta en 2013.
No obstante, Bloomberg resalta que son más lucrativos los regalos que los países hacen a los atletas ganadores, que incluyen dinero en metálico, exenciones del servicio militar y vacas. A modo de ejemplo: Carlos Yulo, quien la semana pasada se convirtió en el primer medallista de oro masculino de Filipinas, disfrutará por ello de un apartamento totalmente amueblado y de toda una vida de colonoscopias gratuitas.
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